LA HERENCIA (La maldición de las siete novias). Por NORA ROBERTS. Crítica.

 LA HERENCIA

 

 

¡Hola queridos y queridas! Vuelvo para hacer la reseña de un libro recién escrito de la famosísima autora Nora Roberts. Esta vez se trata de “LA HERENCIA, la maldición de las siete novias”. Primer libro de una trilogía de fantasía romántica llena de misterio y aventura que no podéis perderos si… no queréis moriros de aburrimiento.

Lo siento, tenía que decirlo. Si lo has leído y estás de acuerdo, te llevas un abrazo de mi parte para darte mis condolencias por perder el tiempo. Si te ha gustado, ¡genial! Mejor que mejor.

En fin, empecemos.

FICHA TÉCNICA

Género: Fantasía Romántica

Páginas: 495

Fecha de publicación en español: 2024

Editorial: SUMA de letras

ISBN: 9788491299110

 

SIPNOSIS

“Siete novias muertas, una mansión hechizada llena de fantasmas y una maldición de dos siglos. Nora Roberts deslumbra en una nueva trilogía llena de magia y amor verdadero.

Sonya recibe la noticia de que su difunto padre tenía un hermano gemelo poco después de romper su compromiso matrimonial y perder su trabajo, así que, cuando descubre que su tío desconocido le ha dejado en herencia una mansión victoriana en la costa de Maine, decide instalarse en ella para descubrir por que los niños fueron separados al nacer y la razón por la que todo se mantuvo en secreto.

La joven no tarda en darse cuenta de que en la casa ocurren cosas muy extrañas. Trey, el abogado amigo de la familia que la ayuda a instalarse, le confirma que el lugar está embrujado y le habla de Astrid, "la primera novia perdida", cuyo retrato decora el despacho de su tío. Sonya también ha heredado una maldición centenaria y un enigma que debe resolver para romperla”.

 

OPINIÓN

Atención, mi opinión tiene algunos spoilers de la trama. Lee bajo tu criterio.

Este libro es uno en el que supuestamente la fantasía de fantasmas y romance llenarán tus ojos. Promete que vivirás una trama escalofriante que mantendrá a los lectores despiertos mucho más allá de su hora habitual de dormir ó incluso que es una nueva y emocionante trilogía.

Bueno, bueno, empecemos destripando que el libro I consta de tres partes. La primera se titula “La traición”, la segunda “La casa solariega”, y la tercera y última “Espíritus”. Conociendo este detalle, empecemos por dar mi humilde opinión de dichas partes.

Comenzando por “La traición”, es la que más me ha gustado leer. Amena, divertida, con algo de comedia, como empezando una nueva historia a punto de ser contada de la mejor manera. Se me pasaron las hojas volando y tenía una intriga aplastante a consecuencia de lo que se describía. Sonya, la protagonista, tiene una vida de ensueño. Es una artista del diseño gráfico digital y trabaja para una empresa muy competente en la que se lleva fenomenal con todos los empleados, incluidos sus jefes. Se va a casar con uno de sus compañeros de trabajo que es un “partidazo”. Un hombre perfecto pero al que solo le importa él mismo. Y para acabar, tiene una mejor amiga que es como su hermana y a la que leeremos en todo el libro.

Sin embargo, toda la dicha se acaba cuando pilla a su querido prometido, con el que se va a casar y lo tienen todo planificado, colocándole una querida cornamenta en la cabeza con su prima, en SU cama. Empezando por ahí, ya imagináis que todo cambia para Sonya. Además, después de esto, aparece un hombre entrajado asegurándole que tiene una herencia de su difunto tío en la que le lega una magnífica casa solariega gigantesca y que data de los 1800… Todo esto me pareció muy buen comienzo, porque pude sentir el vértigo que sufrió Sonya con todo el cambio y la indecisión de si aceptar tal herencia o no. De descubrir que tenía un tío, gemelo de su padre, que desconocía por completo y la subtrama que aparece por ahí, como tirando de un hilo. Me encantó, no os voy a engañar. No obstante, aquí empieza el declive.

La segunda parte “La casa solariega”, describe cómo es la vida de Sonya viviendo en la magnífica casa heredada por su tío. Ahí comprendemos que esa casa está embrujada, por lo que ocurren sucesos paranormales. Además, se empieza a comprender que ella está inmersa en una maldición que debe deshacer. En esta parte, he de decir que no me desagradó, pero sí que me aburrió. Os comento esto porque, a ver, ¿a vosotros os hace gracia que, página tras página, la autora nos brinde “la emoción” que supone los detalles del trabajo de Sonya? Vamos, es que yo ya me considero experta en diseño gráfico gracias a las minudeces que envuelven la tarea de crear páginas webs, diseños para un bufete de abogados, o incluso una presentación para una mujer que se dedica al arte de la escultura. En serio, el libro está lleno (sino la mitad, más de la mitad de las páginas) de detalles con respecto al trabajo de Sonya. Sé que esto enriquece un texto, lo hace más real, pero para mí se me hace ETERNO e INCOMPRENSIBLE leer una cosa que creías que era fantasía romántica, y resulta que es un libro del día a día de una trabajadora con pinceladas de sucesos paranormales (nótese que los sucesos más increíbles fueron ruidos, golpes y apagones de luces). Lo siento, pero para mí esto resta muchísimo las ganas de leer.

Bueno, decir que en esta parte se conoce más de la casa y de su historia, así como de las novias que murieron en ella. Esto está realmente chulo, pero no suficiente como para sumar más que restar.

En la tercera parte, “Espíritus” sigue la misma tónica que la segunda: trabajo y más trabajo, descripciones del día a día de Sonya, obtención de un perro, de otro novio y Cleo que se muda a la casa con ella. Es que, en serio, no hay más. Os puedo resumir el libro en eso. La historia de las novias es como si quedasen en un segundo o tercer plano. ¡Lo interesante de la novela está muy mal planteado! Es que, el libro bien podría llamarse “Descripciones de una diseñadora gráfica y los paseos a su perro”. No hay más y eso me entristece.

Por otra parte, los personajes son lo mejor que tiene la novela. Empezando por Sonya que es una gran protagonista, sensata, trabajadora y emocionalmente estable. Su vida es la envidia de toda mujer y una gran inspiración de cara a una proyección de futuro. Luego encontramos a Cleo, su mejor amiga, quien es divertida, carismática y cree en la magia criolla de su abuela. A mí me cayó de cine. Además es ilustradora, lo cual gana puntos porque amo dibujar. Trey, por otra parte, el abogado que finalmente seduce a Sonya, es dulce, educado, caballeroso, atractivo y adinerado. Vamos, un partidazo en la vida real, pero en la literatura es un ABURRIMIENTO. Lo siento, es que a mí no me puedes poner un protagonista masculino menos protagonista que él. Realmente lo siento si lees esto y opinamos diferente, pero es lo que yo he sentido al leerlo.

Los demás personajes secundarios son geniales, caen bien y son reales. Es lo mejor que tiene el libro. Además, las historias de las novias muertas, la bruja que organiza toda la maldición y los relatos que se conocen página tras página son lo mejor también. Podemos considerar que Yoda, el perro de Sonya, también es un protagonista. Sin duda ocupa un tercio del libro.

 

PUNTUACIÓN

Trama: un 7/10. Es una buena trama pero contada de mala manera. ¿A quién no le llama la atención una buena historia de misterio mezclada con fantasía de fantasmas?

Ritmo de la historia 4/10. MUY lento. Detalles innecesarios que no aportan nada a la trama principal. Desarrollo de cosas cotidianas demasiado extensas. Poco contenido paranormal o muy flojo y sin nada de novedad para el género.

Narración: 10/10. Aunque la trama esté bien y los ritmos muy lentos, la narración es un espectáculo. No por nada Nora Roberts es una de las mejores escritoras del género romántico y drama.

Personajes: 7/10. Lo mejor de la novela, excepto por Trey, más soso y no nace el pobre.

Romance: 0/10. Lo siento pero no tiene NADA de romance a excepción de que, de repente, Sonya se hace novia de Trey por costumbre vamos. Es que no tiene enganche este apartado. Para mí suspende de cabeza.

TOTAL: 5´6 de 10. No lo recomiendo mucho, la verdad.

 

¡Esto ha sido todo! Esperemos que el segundo libro tenga más emoción y que la autora se de cuenta de que se pasa de la ralla con tanta descripción innecesaria y cotidiana. ¡Un abrazo!